Cúrcuma y Jengibre, ¿de verdad son tan buenos como los pintan?

La cúrcuma es una planta herbácea de la familia del jengibre. La curcumina es su principal polifenol natural. Esta hierba medicinal se ha utilizado desde hace muchos años en la medicina tradicional en países asiáticos debido a su gran potencial antioxidante, antiinflamatoria, antimutagénica, antimicrobiana y anticancerígena.

En diversos estudios se ha encontrado que la cúrcuma tiene múltiples beneficios para la salud ayudando en afecciones inflamatorias, síndrome metabólico, dolor, afecciones oculares inflamatorias y degenerativas, ayuda a la salud de los riñones esto es debido a su efecto antioxidante y antiinflamatorio. Gracias a sus múltiples beneficios la cúrcuma ha recibido atención mundial, estos parecen potenciarse cuando se combina con otros agentes como la piperina, compuesto encontrado en la pimienta negra.

Algunas investigaciones han encontrado que la cúrcuma, gracias a su compuesto activo, puede ayudar en el manejo de condiciones oxidativas e inflamatorias, síndrome metabólico, artritis, ansiedad e hiperlipidemias. Asimismo, se ha encontrado que puede ayudar en la inflamación y dolor muscular producidos por la realización de ejercicio, ya que mejora la recuperación y el rendimiento.

El jengibre es una planta muy popular que se ha utilizado para el tratamiento de dolor, náuseas y vómitos. Su principal compuesto es el gingerol, además de terpenos, vitaminas y minerales. Se han investigado sus propiedades antioxidantes, antimicrobianos y anti-neuroinflamatorios y en años más recientes se ha estudiado su papel en la lucha contra el cáncer. De acuerdo con múltiples estudios, el jengibre ha sido eficaz en el tratamiento de náuseas, vómitos, función gastrointestinal, dolor, inflamación, síndrome metabólico, entre otros.

El jengibre es capaz de reducir los síntomas de la dismenorrea, así como el dolor menstrual. En otro estudio, se comprobó su propiedad para mejorar el perfil de lípidos y el control de la glucosa, sensibilidad a la insulina y la hemoglobina glicosilada en personas con diabetes mellitus II. Del mismo modo, se ha sugerido que el jengibre tiene el potencial del tratamiento de la artritis, disfunción gástrica y cáncer.

El jengibre y la cúrcuma son dos plantas que se conocen desde hace muchos años. Estas han sido utilizadas en la medicina tradicional debido a que tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, anticancerígenas, antimicrobianas y antimutagénicas, las cuales han quedado comprobadas en diversos estudios.

Equipo de investigación y editorial iNat México. 

Referencias

Hewlings, S. J., & Kalman, D. S. (2017). Curcumin: A Review of Its Effects on Human Health. Foods (Basel, Switzerland), 6(10), 92. 

Anh, N. H., Kim, S. J., Long, N. P., Min, J. E., Yoon, Y. C., Lee, E. G., Kim, M., Kim, T. J., Yang, Y. Y., Son, E. Y., Yoon, S. J., Diem, N. C., Kim, H. M., & Kwon, S. W. (2020). Ginger on Human Health: A Comprehensive Systematic Review of 109 Randomized Controlled Trials. Nutrients, 12(1), 157. 

 



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