Los ácidos grasos omega 3 (EPA, DHA, ALA, etc.) juegan un papel importantísimo para la salud, tanto para la prevención de enfermedades cardiovasculares, cáncer y hasta para enfermedades inmunológicas. Son, además, fundamental para el desarrollo y funcionamiento del cerebro.  

Efectos benéficos de los Omegas 3: 

  • Apoyan en el desarrollo estructural del cerebro y la retina durante la gestación.
  • Mejoran la capacidad visual ante la luz y la habilidad cognitiva durante el desarrollo del bebé. 
  • Proveen un efecto antitrombótico y antiarrítmico, evitando la adherencia de plaquetas en las arterias.  
  • Disminuyen la producción de interleucinas y factor de necrosis tumoral que evitan la inflamación ante un ataque viral. 
  • Son precursores de compuestos hormonales.
  • Están relacionados con problemas de depresión, gracias a su efecto protector por medio del DHA en condiciones de estrés (Castro, 2002). 
  • Tiene efectos reguladores en enfermedades como: diabetes tipo 2, cáncer, colitis ulcerativa, enfermedad de Crohn, obstrucción pulmonar, renal, psoriasis, artritis reumatoide, etc. (Castro, 2002). 

Fuentes

Si bien, se cree que la mayor fuentes de AG Omega 3 provienen del aceite de pescado, existen también plantas y alimentos de origen vegetal que cumplen perfectamente la función de aportar omegas a la dieta:

 

 

Aceites vegetales

 

Se recomienda una ingesta diaria de al menos 1 g al día. Otras fuentes han indicado que incluso el consumo de ALA sea de 2.2 g/d y que de EPA y DHA sea de al menos 0.65g/d (Simopoulos et al. 1999). 

Referencias: 

  • Castro, M. (2002) Ácidos grasos Omega 3: beneficios y fuentes. Interciencia 27(3). Caracas. 

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