En México se recolectan diariamente 86,343 toneladas de basura, es decir, 770 gramos por persona y son generadas principalmente en: viviendas, edificios, calles y parques, según datos del Instituto Nacional de Geografía e Informática (INEGI, n.d.). Por lo anterior, el Banco Mundial y numerosas organizaciones ambientalistas llaman la atención sobre la necesidad de reducir la producción de basura en los próximos años.
Por otro lado, existen algunas formas sencillas de contribuir con ese objetivo en la vida cotidiana; así que aquí te otorgamos 5 consejos para generar menos basura doméstica:
1. Sé un consumidor consciente: un buen comienzo es cuestionarte antes de comprar algo: ¿en verdad lo necesito? ¿Cuál fue la huella ecológica al hacer este producto? Observa el origen de las cosas que consumimos, no es lo mismo un empaque de cartón a uno de plástico. ¿A dónde va a parar este producto cuando no lo use más? Tenemos que ser conscientes, pues es muy probable que terminará en el mar o en tiraderos de cielo abierto y esto es altamente contaminantes para el medio ambiente. Estas simples preguntas te van motivar a contemplar las siguientes propuestas .
LA PROPUESTA DE LAS TRES R
2. Reducir: se refiere principalmente a consumir menos, comprar lo esencial para la vida, no caer en el consumismo y disminuir nuestro gasto de agua y energía,ya que las fuentes actuales son altamente contaminantes. El apagar las luces y desconectar los aparatos eléctricos cuando no los utilizamos, contribuyen al ahorro energético.
3. Reutilizar: te invitamos a alargar la vida de cada producto. Sé creativo e intenta agotar el uso de las cosas que ya tienes no quitarles el valor; vivimos en una sociedad desechable en donde todo tiene un tiempo de vida muy limitado, por lo cual compra cosas de calidad y sé muy selectivo en los materiales, que tengan la menor huella ecológica y que sean de larga duración.
4. Reciclar: es una manera en la que se reincorpora la materia prima al ciclo; se trata de usar los materiales para crear nuevas cosas sin necesidad de gastos energéticos y sin aumentar el volumen de residuos. El reciclaje se debe de volver un hábito para poder conseguir un equilibrio entre lo que se produce, lo que se consume y lo que se desecha, intentando siempre generar la menor cantidad posible de basura. Reciclar vidrio, materia orgánica, llantas o plástico, son algunos ejemplos.
Y, finalmente:
5. Composta en casa: hablando de la materia orgánica que producimos, una opción muy viable sería la de crear nuestra composta para reintegrar esta materia a los suelos y así seguir con el ciclo natural de la tierra, regresándole, por medio de la composta, todos los minerales y nutrientes que nos están aportando, así también tenemos un mejor manejo de los residuos y ayudaremos a que no se putrefacte en los rellenos sanitarios, que es a donde va a parar toda esa materia orgánica .
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Comments are closed.
