Durante muchos años, se nos hizo creer que la leche materna no era suficiente, que los niños se desnutrían y que pocas veces era opción para ser la única vía de alimentación disponible para el bebé. Sin embargo, en estos últimos años, ese mito ha sido desbancado por la evidencia científica que nos muestra que la lactancia materna es lo mejor que le puedes dar a tu bebé…
La Lactancia Materna (LM) es la forma ideal de otorgar al bebé, durante sus primeros años de vida, los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludable. Según la OMS, prácticamente todas las mujeres son aptas para amamantar, sin embargo, esta condición depende enteramente de la disposición que tenga a la información, apoyo de la familia y entorno laboral y el sistema de salud.
No obstante, todos esos factores que hacen que la LM se dé de manera exitosa, no siempre suelen converger y es ahí donde surgen las dudas que alimentan la inseguridad de una madre que lacta: ¿estaré nutriendo adecuadamente a mi bebé?, es que llora mucho, ¿será que no lo lleno?, ¿mi leche es suficiente?… y ante todas estas dudas, la leche en polvo nos titila en la mente como una buena opción para “complementar”.
Ya sabemos los increíbles beneficios que otorga la LM, de hecho cada año se lleva a cabo la Semana Mundial de la Lactancia Materna justamente para que durante ese lapso de tiempo se informe sobre las bondades y las necesidades de que esta práctica prevalezca por encima de la alimentación de fórmula; sin embargo, los resultados van muy lentos. Todavía vemos madres que, a causa del desconocimiento y la preocupación, otorgan fórmula para su bebé porque piensan que no están nutridos adecuadamente.
Pero ¿es realmente necesaria la fórmula? La respuesta es NO, nunca, la LM cumple perfectamente con todas las propiedades nutricionales que tu bebé necesita en cada una de sus etapas durante sus primeros años de vida.. De hecho, es un alimento tan inteligente, que se adapta a las necesidades de tu bebé si este enferma o está sediento. Sin embargo, esto va a depender de la información que tengas previo al nacimiento, el apoyo y la guía del profesional de salud.
Si bien, existen muy poquitos casos en donde sí será necesario utilizar la fórmula, realmente son contados los casos en donde se prescribe. Pero debemos recordar que jamás los beneficios nutricionales se van a comparar con la leche materna, porque no hay un alimento en polvo que pueda siquiera compararse con las propiedades de la LM.
No obstante, la forma en que tú decidas alimentar a tu bebé, es igual un acto de amor.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
- Organización Mundial de la Salud (n.d.) Lactancia materna. Artículo recuperado de sitio web.
- Coya, M. (2020) Microbiota intestinal en recién nacidos alimentados con lactancia materna exclusiva. Universidad Nacional del Altiplano.
- Gorrita, R. Brito,D. & Ruiz, E. (2016). Educational intervention in breastfeeding in the first six months of life. Revista Cubana de Pediatría, 88(2).
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