La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune inflamatoria crónica, que afecta a un mínimo porcentaje de la población mundial. Esta suele afectar principalmente las manos, las muñecas y rodillas causando dolor, inflamación y daño articular. Factores genéticos y ambientales son los involucrados en el desarrollo de esta enfermedad. Sin embargo, se ha sugerido que el tabaco, enfermedades infecciosas y bacterias intestinales también pueden intervenir para el desarrollo y progresión de la artritis. Los cambios en la dieta podrían ser una intervención fácil y económica para el manejo de la artritis reumatoide.
Hoy en día existen pruebas que respaldan la influencia de la dieta en el sistema inmunitario desequilibrado de la artritis reumatoide, que se caracteriza por un aumento del número de células proinflamatorias. Mantener un peso corporal elevado y las dietas que incluyen alimentos de origen animal han demostrado exacerbar los síntomas de la artritis, esto podría ser a causa de sus efectos proinflamatorios. Una dieta rica en verduras, frutas y fibra se caracteriza por tener propiedades antiinflamatorias ayudando a reducir el dolor y la inflamación en aquellas personas que padecen de esta enfermedad. Seguir una dieta libre de alimentos de origen animal por 4 semanas ha demostrado mejorar síntomas como dolor articular, rigidez, hinchazón y limitación de la función.
Si bien la práctica del ayuno terapéutico brinda propiedades antiinflamatorias, el periodo posterior de su aplicación los síntomas reaparecen con más frecuencia. Pero puede retrasarse mediante la implementación de dietas o alimentos específicos, como lo es una dieta basada en plantas. Después de seguir por 7 a 10 días de ayuno modificado seguido de una dieta basada en plantas, se encontró que se disminuían síntomas como rigidez matutina, reducción del dolor y aumento de la función en aquellas personas con artritis reumatoide hasta por un año.
Las dietas basadas en plantas tienen propiedades para combatir la inflamación. Se ha demostrado que una dieta rica en alimentos vegetales reduce los marcadores de inflamación en comparación con una dieta rica en grasas y alimentos de origen animal. Asimismo, las dietas ricas en grasas y carne procesada se asocia con marcadores inflamatorios elevados como proteína C reactiva o PCR. Una dieta basada en plantas y rica en fibra ayuda a que estos marcadores se encuentren en niveles bajos.
Por otro lado, se ha visto que este tipo de dietas ricas en frutas y verduras ayudan a promover el crecimiento de bacterias intestinales saludables. Hay estudios que han vinculado el microbioma intestinal con la artritis reumatoide e inflamación. Las dietas con un alto contenido de fibra pueden modificar de manera positiva la composición bacteriana de la microbiota intestinal al incrementar su diversidad, la cual en la mayoría de las personas con artritis reumatoide se encuentra alterada.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias:
Alwarith, J., Kahleova, H., Rembert, E., Yonas, W., Dort, S., Calcagno, M., Burgess, N., Crosby, L., & Barnard, N. D. (2019). Nutrition Interventions in Rheumatoid Arthritis: The Potential Use of Plant-Based Diets. A Review. Frontiers in nutrition, 6, 141.
Hartmann, A. M., Dell’Oro, M., Kessler, C. S., Schumann, D., Steckhan, N., Jeitler, M., Fischer, J. M., Spoo, M., Kriegel, M. A., Schneider, J. G., Häupl, T., Kandil, F. I., Michalsen, A., & Koppold-Liebscher, D. A. (2021). Efficacy of therapeutic fasting and plant-based diet in patients with rheumatoid arthritis (NutriFast): study protocol for a randomised controlled clinical trial. BMJ open, 11(8), e047758.
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